viernes, 21 de enero de 2011

Derechos Humanos y defensa

Vaya en primer lugar una opinión, para no ser mal interpretado: cuando las flotas pesqueras faenan en zonas marítimas donde los pobladores del país o Estado a las que corresponden no pueden ejercer la soberanía, por conflictos como guerras, revoluciones, golpes de estado, etcétera, o sea cuando no hay una autoridad nacional que permita y regule la pesca, en nombre de los legítimos dueños de esas aguas, se está ante un robo o latrocinio. Tal ha sido el caso del Sahara Occidental y Canarias, con el famoso banco pesquero Canario-Sahariano y es actualmente lo que sucede en las aguas de Somalía. Aquellas aguas no son una res derelictae (http://es.wikipedia.org/wiki/Res_derelictae), pertenecen a los somalíes y lo lógico sería que la comunidad internacional ejerciera la tutela sobre esas aguas para evitar la esquilmación de las mismas.

Dicho esto el siguiente planteamiento es que si las flotas pesqueras de varios países, como España, Holanda, China.... etcétera, faenan en esas aguas, de Somalía, es porque pueden hacerlo desde el punto de vista legal. Si no fuera así, los respectivos gobiernos deberían, al menos, advertir a los armadores que en esas zonas la pesca equivale a robar.

De acuerdo con las leyes internacionales del mar si unos elementos se dedican a asaltar a los buques que están faenando pacíficamente se les considera piratas y los tripulantes de los buques y los armadores de estos tienen derecho a defenderse. Como resulta que las grandes naciones que tienen buques faenando en las aguas de Somalía están preocupados pues envían allí a sus barquitos de guerra para defenderlos, cosa admisible si suponemos la legalidad de la pesca que se realiza.

Esta mañana oigo en las noticias que fuerzas especiales de un buque de guerra coreano (del sur) toma por asalto un buque secuestrado por piratas y lo libera. En la operación mueren varios piratas y resulta herido el capitan del barco.

Nadie ha levantado la voz para acusar a Corea del Sur de vulnerar los derechos humanos de los piratas, ni de acusarles de brutalidad, en fín, que nadie protesta. Es mas, la armada de Corea del Sur se ha ganado el respeto de los militares de países amigos, de sus ciudadanos y, sobre todo, de los demás piratas, que se pensarán dos veces meterse con un barco coreano.

Comparemos esta actitud con la de España.......

En esto y en mas cosas estamos vendidos y no sigo, porque estas cosillas cabrean.


http://espanol.news.yahoo.com/s/ap/110121/internacional/asi_gen_corea_del_sur_pirateria

miércoles, 19 de enero de 2011

El Gran Quevedo

Esta mañana al abrir mi correo en el despacho me encuentro con uno de una lista de distribución a la que estoy suscrito (no me acuerdo si se dice dice así y no lo puedo mirar porque este ordenador es el que usa mi hijo menor y es un cochafisco) donde venía una referencia al enlace que ahora pongo mas abajo. No paré de reirme en un rato, y teniendo en cuenta que mañana hay que pagar las retenciones, a fin de mes el IGIC y además presentar los resúmenes con una hoja suelta que hay que pegar en un sobre, nuevo invento de nuestra genial y avanzada Dirección General de Tributos del Gobierno de Canarias, además de tener que encargarme, seguramente, de sacar las firmas digitales de los clientes para la nueva obligación (si, obligación) de recoger de forma telemática las notificaciones de la AEAT, etcétera, pues resulta gratificante pegarnos unas buenas carcajadas.

El enlace a que hacía referencia es este:
 http://historiasconhistoria.es/2011/01/17/breve-explicacion-de-porque-la-quiromancia-es-una-patrana.php

La verdad, nada mas que la fila de personajes en estílo "línea clara" que figura en la parte alta de la página ya es atractiva y luego, la rotundidad del artículo, es que no le falta nada mas al genial Quevedo para desmontar la quiromancia.

No me resisto a ponerlo aquí, perdonen ustedes.
"Todas las rayas que vieres en las manos, oh curioso lector, significan que la mano se dobla por la palma y no por arriba, y que se dobla por las junturas; y por eso están las grandes en las coyunturas désas, como es cuero delicado, resultan las otras menudas.
Y para ver que esto es así mira que en el pescuezo y frente, caderas, corvas y codos y sangraduras y nalgas, por donde se arruga el pellejo y en las plantas de los pies hay rayas. Y así había de haber, si fuera verdad (como hay quirománticos), nalguimánticos, y frontimánticos y codimánticos y pescuecimánticos y piedimánticos.
Francisco de Quevedo. Obras Jocosas.
Libro de todas las cosas y otras muchas más. (1631)